Pocas etapas en la historia de la humanidad son tan interesantes como la del Neolítico. Este periodo hizo su aparición en Aragón hacia el 5000 a.C. y está caracterizado por una extraordinaria revolución en la sociedad que, aun cuando en ocasiones mantuvo unos sistemas de vida anteriores, a partir de este momento tendió a desarrollar la ganadería y, especialmente, la agricultura. Ello implicó que poco a poco el ser humano se fue sedentarizando, apareciendo los primeros poblados.
Con ellos llegaron nuevas innovaciones tecnológicas como la técnica del pulimentado y el desarrollo de una incipiente artesanía cerámica.
Por desgracia es muy poco lo que conocemos de esta época en nuestra zona de estudio y encima casi todos los datos proceden de la mitad occidental, lo cual supone un importante handicap para realizar una correcta interpretación.
El Neolítico
Sin embargo pacientemente vamos incrementando el conocimiento de esta zona a través de las sucesivas campañas de Prospecciones en el entorno de Cabeza Ladrero. Así hasta el momento ya son 19 los sitios identificados con esta cronología. Aunque la mayor parte de ellos posiblemente deban identificarse como pequeños lugares de paso, algunos de ellos como Alto Vico I, San Isidro o Chacona I quizá pudieron convertirse en pequeños poblados que supusieron el inicio de la ocupación estable de la zona, que ya desde esta época tan temprana parece desarrollar una cierta predilección por una serie de espacios muy definidos, como la planicie situada entre las vales de Valdeoscura y Mamillas que, con posterioridad, tendrán una gran ocupación.